Que el camino de la e-salud, la telemedicina, la integración diaria, natural y espontánea de la tecnología y la salud en nuestras vidas es algo que está comenzando mientras que estamos experimentando, probando, fallando, … no es nada nuevo.
Y una de las claves que nos surgen (y que sin duda así debe ser) son las preguntas. De muchos tipos, muchísimos. El desarrollo de la e-salud no es algo fácil, diría que casi espinoso en distintos frentes: éticos, tecnológicos, culturales, etc.
A nosotros en el día a día no paran de surgirnos, y hoy queríamos compartir con todos vosotros un conjunto de ellas que creemos pueden obtener respuestas más que interesantes.
Para no hacerlo muy pesado, hemos seleccionado seis con un enfoque muy «generalista» para esta primera batería. Os dejo con ellas:
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Os animamos a responder y poder poner en común el enfoque particular de cada uno, los cuales seguro son enriquecedores.
Por aquello de no mezclar preguntas y respuestas, me permito el lujo de responder a la encuesta 🙂
1.- Una pregunta compleja. Creo que estamos preparados hasta cierto punto. Debemos cambiar de mentalidad, lo cual no siempre es fácil: A día de hoy creo que todavía nos queda camino para gestionar nuestra salud de una forma tan inmediata y «siempre disponible», pero pienso que se irá normalizando ya que las ventajas superan claramente a los inconvenientes, al menos desde mi visión de tecnólogo :). Creo que la privacidad es algo tremendamente importante, pero creo que puede ser compatible con una visión abierta de la gestión de la salud, muy al estilo Openness de PatientsLikeMe. Un entorno donde poder aprender de los demás, compartir información de forma transparente y dejar atrás la visión vertical de la relación profesional -> paciente.
2.- A corto plazo, de forma general creo que como poco me gustaría ser capaz de poder gestionar las tareas más habituales con mis profesionales habituales: citas médicas, gestión de medicación, resultados de pruebas médicas, etc. así como la gestión de informes, métricas y estadísticas personalizadas, para lo cual el entorno de Internet es sin duda óptimo. A medio / largo plazo, sería mucho más ambicioso 🙂
3.- Soy un auténtico convencido de que la m-health es clave para el desarrollo de la salud por Internet. Es posible que falte algo más de penetración de conexiones de banda ancha en dispositivos móviles y smartphones, pero van en aumento. Además se me ocurren muchísimas aplicaciones: gestión de emergencias, conexión con tus profesionales habituales donde estés, etc. No obstante, aquí en este terreno todavía nos queda más que en los PC tradicionales.
4.- En orden decreciente en importancia: culturales, tecnológicos y éticos 🙂 .
5.- De aquí a diez años veo un engranaje notablemente más maduro, plataformas robustas y seguras de gestión de la salud personal y sobre todo muchas mejoras en uno de los frentes más importantes que creo abiertos: la integración y la interoperabilidad de los datos. No creo demasiado en un único sistema de salud centralizado y global, creo en un mercado más fragmentado y heterogéneo.
6.- Creo que lo van siendo ya y lo serán mucho más en un futuro. Twitter tiene un componente maravilloso, casi mágico, de inmediatez. Resulta muy curioso cuando llevas unos meses usándolo y ya vas creando un pequeño círculo de confianza. Llegas a tener mucho conocimiento solo de escuchar lo que van dejando en su timeline las personas que sigues. Facebook es un importantísimo aglutinador de información. Y esto son solamente dos pequeños ejemplos. Me gustan mucho tambien muchos proyectos más especializados por Internet que van apostando por la e-salud, españoles o no. Creo que el ecosistema no va a parar de crecer.